No deje que una bonita fachada le engañe: utilice nuestra lista de comprobación para asegurarse de que la integridad estructural de su próximo producto de madera (una cómoda, un tocador o un armario, básicamente muebles fabricados con materiales duros) está a la altura de sus exigencias. Esto es lo que se debe tener en cuenta según Astigarraga:
¿Qué juntas se utilizan en la parte delantera y trasera de los cajones?
Saque los cajones y mire en su interior para asegurarse de que se ha utilizado una unión resistente, como la cola de milano. Las uniones más débiles no aguantarán el paso del tiempo.
¿El fondo del cajón es de madera?
Mientras el cajón está sacado, determine si el fondo del cajón es de madera. También podría ser de melamina o masonita, que son opciones más baratas que no durarán tanto.
¿Las guías del cajón también son de madera?
Las guías de metal pueden doblarse más fácilmente que las de madera, lo que dificulta el movimiento del cajón hacia dentro y hacia fuera. Las guías de madera no se doblan tan fácilmente y duran más.
¿Se ven separadores de polvo entre cada cajón?
Al mirar el interior de la cómoda, el tocador o el mueble con todos los cajones retirados, ¿ve usted finas piezas de madera debajo de donde descansaría el cajón? Debería haber un separador de polvo entre cada cajón para proteger el contenido de su interior.
¿Hay bloques de esquina y topes de cajón?
Los bloques de esquina y los topes de los cajones son detalles que mejoran la integridad estructural de la pieza. Los muebles de calidad los tienen.
Si está dispuesto a gastar un poco más por un mueble de calidad, asegúrese de que la estructura y el diseño del producto no están comprometidos. Esta lista de comprobación le ayudará a identificar los lugares en los que los fabricantes suelen tomar atajos para reducir costes, de modo que pueda estar seguro de que recibe lo que paga.